Los trabajadores de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de México han decidido unirse al paro de labores que comenzó el 19 de agosto, en oposición a la reforma judicial propuesta por el presidente Andrés Manuel López Obrador. Esta decisión fue tomada durante una asamblea convocada por el Colegio de Jóvenes Estudiantes de Derecho y Nuevos Profesionistas de la SCJN, en la que una amplia mayoría de los presentes votaron a favor de unirse a la protesta.
La asamblea se llevó a cabo en el Auditorio José María Iglesias del edificio principal de la Corte y contó con la participación de más de tres mil empleados del máximo tribunal del país, incluidos muchos que laboran en edificios alternos. Según fuentes consultadas, los trabajadores planean informar formalmente a los ministros sobre su decisión de unirse al paro, y se anticipa que el Pleno de la Corte tomará una decisión sobre si pueden continuar trabajando sin el personal o si es necesario suspender las labores.
Cabe mencionar que la ministra Lenia Batres Guadarrama ha expresado su desacuerdo con la participación del Poder Judicial de la Federación, y específicamente de la Corte, en estos paros. Ella sostiene que el máximo tribunal debe cumplir con sus responsabilidades constitucionales, aunque también respeta la libertad de expresión de los empleados. La situación ha generado un contraste interesante, ya que mientras la ministra Batres se manifiesta a favor de la reforma, la mayoría de los trabajadores de la Corte se opone a ella.