El hallazgo del cuerpo de Francisco Javier Verástica Muñoz, un agente activo de la Policía Estatal Preventiva de Sinaloa, se produjo en un contexto de violencia creciente en la región, marcada por enfrentamientos entre grupos rivales del crimen organizado. Verástica Muñoz fue secuestrado por un grupo armado el 26 de octubre en las cercanías del Aeropuerto Internacional de Culiacán. Su cuerpo fue encontrado en un puente, junto a un mensaje relacionado con el narcotráfico.
Este asesinato marca un hito lamentable, ya que es el primer policía de la corporación que pierde la vida en este contexto de violencia. Sin embargo, no es un caso aislado, ya que anteriormente se habían registrado otros homicidios de agentes activos y retirados en Culiacán y Mazatlán, incluyendo la ejecución de mandos de la policía municipal.
El clima de inseguridad ha ido en aumento, y estos eventos resaltan la grave situación que enfrentan las fuerzas policiales en la región. La práctica de "ponchallantas", utilizada por los delincuentes para entorpecer el tránsito, también subraya los métodos violentos que se emplean en estas disputas.