El presidente Andrés Manuel López Obrador presentó un informe sobre la situación del sistema de salud en México, destacando los avances y los retos que enfrenta el país en este ámbito, especialmente en relación al ISSSTE. A solo seis días de dejar la presidencia, realizó un reporte extensivo que se conectó con varios gobernadores, que en su mayoría aprovecharon la ocasión como una despedida hacia el mandatario.
López Obrador enfatizó que, a pesar de los avances en garantizar el derecho a la salud, el sector todavía necesita mejoras, especialmente en la disponibilidad de médicos especialistas. Reconoció que la política neoliberal del pasado había afectado la formación de estos profesionales, pues se cerraron oportunidades en universidades públicas. Sin embargo, también mencionó la colaboración con Cuba en el envío de médicos como un aspecto positivo de su gestión.
Además, el presidente aseguró que su administración se opuso a la privatización del sistema de salud, algo que, según él, sus adversarios habían promovido. Manifestó confianza en que la próxima administración, encabezada por una mujer que considera sensible y comprometida, continuará con su enfoque y proyectos en salud.