La situación de Tesla y su proyecto de planta en México ha generado preocupación debido a las declaraciones de Elon Musk en relación a la política comercial estadounidense, especialmente en el contexto de las próximas elecciones presidenciales. Musk ha señalado que la posibilidad de aranceles altos propuestos por Donald Trump a los vehículos fabricados en México es un factor que complica la inversión en el país.
Trump ha manifestado en diversas ocasiones su intención de aplicar una tarifa del 100% a los vehículos que crucen la frontera desde México, especialmente en el contexto de una potencial guerra comercial con China, lo que podría afectar significativamente a los fabricantes automotrices que operan en México, incluyendo a Tesla. Esta situación también refleja cómo la política y las elecciones pueden influir en las decisiones de inversión de grandes empresas.
La planta de Tesla estaba planificada para Santa Catarina, Nuevo León, y la suspensión de este proyecto pone de manifiesto la interconexión entre la política, la economía y las decisiones empresariales en la industria automotriz. Las próximas elecciones, programadas para noviembre, serán claves para determinar el clima político y económico, y por lo tanto, el futuro de la inversión de Tesla en México.