El viernes 20 de diciembre, el peso mexicano mostró una recuperación significativa, cerrando la jornada a una cotización de 20.0342 pesos por dólar, lo que marcó su mejor nivel desde el 7 de noviembre. Este fortalecimiento del peso se produjo en un contexto de volatilidad impulsada por diversos factores económicos, incluyendo datos de empleo e inflación, así como decisiones de política monetaria tanto del Banco de México como de la Reserva Federal de Estados Unidos.
El día anterior, el peso había sufrido una caída notable, alcanzando un valor de 20.4958 pesos por dólar, lo que representó una pérdida de 12.38 centavos (0.6%) respecto al cierre anterior. Esta caída se había desencadenado por el anuncio de la Reserva Federal sobre un nuevo recorte en su política monetaria y una menor proyección de recortes en las tasas de interés para el futuro.
Sin embargo, la moneda mexicana logró recuperarse cuando el Banco de México decidió unánimemente reducir su tasa de interés al 10%. Durante la sesión del viernes, el tipo de cambio osciló entre un mínimo de 20.0250 y un máximo de 20.1850, logrando una ganancia de 26.42 centavos (1.3%) respecto al cierre del jueves.
En términos semanales, el peso también presentó una leve recuperación, con un aumento de 09.39 centavos (0.46%) en comparación con el cierre de la semana anterior. Este comportamiento indica una continua lucha del peso por estabilizarse en medio de un entorno económico incierto y tensiones políticas.