En las comisiones unidas de Energía y Hacienda de la Cámara de Diputados de México, se aprobó un dictamen relacionado con la Ley de Ingresos sobre Hidrocarburos. Esta aprobación fue llevada a cabo por los diputados de Morena y sus aliados, con un total de 57 votos a favor, 19 en contra y seis abstenciones. La reforma tiene como objetivo simplificar el esquema fiscal de Petróleos Mexicanos (Pemex), con la intención de reducir la carga administrativa y los costos operativos de la empresa.
El dictamen también incluye cambios significativos en la nomenclatura legal, como sustituir la "Ley de Hidrocarburos" por la "Ley del Sector Hidrocarburos" y cambiar la "Comisión Nacional de Hidrocarburos" por la "Secretaría de Energía". Asimismo, las "Empresas Productivas del Estado" pasan a ser denominadas "Empresas Públicas del Estado", y se redefine el "Derecho por la Utilidad Compartida" como "Derecho Petrolero para el Bienestar". Además, se eliminan las referencias al "Derecho de Extracción de Hidrocarburos" y al "Derecho de Exploración de Hidrocarburos".
Uno de los puntos destacados en la reforma trata de hacer más rentable el gas en México, disminuyendo la carga fiscal que actualmente es del 40% al 12%, lo que se espera que genere mayores ingresos en el proceso de compra o venta de gas.
Durante la discusión, los diputados de la oposición, especialmente del PAN y el PRI, expresaron su desacuerdo con el dictamen, argumentando que no se explicó adecuadamente y que no se alcanzaron los objetivos deseados. En particular, Héctor Saúl Téllez, diputado del PAN, criticó la falta de diálogo con la Secretaría de Hacienda y funcionarios de Pemex, lo que, según él, impidió un entendimiento completo de las razones detrás de la iniciativa.