La ginecóloga Jennifer Gunter publicó en sus redes sociales, estos chicos diseñaron unos guantes para que las chicas no se mancharan o ensuciaran al momento de cambiar sus productos de higiene femenina. La idea surgió porque en 2010, los chicos fueron roomies de varias mujeres y estaban horrorizados porque no había una “solución” a cuando ellas botaban los tampones y toallas sanitarias a la basura.
Entonces, estos tipos diseñaron guantes rosas para que los tampones y las toallas sanitarias se puedan desechar de manera adecuada y discreta.

El texto está traducido del alemán.

El invento se llamó Pinky Gloves y son unos guantes, que lo único que tienen de especial es el color, cuya función es proteger a las mujeres de no ensuciarse las manos. Además, son una especie de bolsa que permite “camuflar” las toallas y tampones para que no se vean cuando los tiran al bote de la basura.
Después de que la doctora hiciera la publicación, las chicas que siguen su cuenta empezaron a expresar sus sentimientos. Hubo furia, desconcierto y hasta enfado, porque reconocieron que es un producto totalmente inútil y que los hombres no tienen ni idea de cómo funciona el proceso de cambiar las toallas o tampones cuando una mujer tiene su periodo.
Aunque la empresa reconoció todas las críticas que está recibiendo. Sin embargo, aún no declara si retirarán su producto del mercado, pero mientras tanto, les vendría bien investigar un poco más sobre la menstruación, pues algunas usuarias aseguran que existe un estigma sobre cómo se usan los productos de higiene íntima.

Con información de Okchicas.