El Congreso de la Unión de México ha declarado constitucional la reforma que traslada la Guardia Nacional a la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), en una sesión que se realizó sin la participación de la oposición. La reforma, parte del "Plan C" del presidente Andrés Manuel López Obrador, fue aprobada por 26 congresos locales, permitiendo así que se avanzara en la modificación de varios artículos de la Constitución.
La iniciativa ya había sido pasada por el Senado, y tras la aprobación en la Cámara de Diputados, fue enviada al Ejecutivo Federal para su publicación en el Diario Oficial de la Federación. Durante la sesión, se registró la ausencia del Grupo Parlamentario del PAN, cuyas y cuyos miembros manifestaron su rechazo a lo que consideran una militarización del país. Esta reforma ha generado debates en la conveniencia de trasladar funciones de seguridad pública a las fuerzas armadas, lo que ha sido un tema controversial en el contexto de la política de seguridad en México.