La información publicada sugiere que la CIA está considerando la posibilidad de utilizar fuerza letal contra los cárteles de drogas en México, una decisión que implica revisar las capacidades legales de la agencia en este ámbito. La administración de Donald Trump parece buscar convertir la lucha contra estas organizaciones criminales en una prioridad, lo que marca un cambio en la estrategia que tradicionalmente ha sido utilizada en el campo del antiterrorismo.
Los informes indican que, si bien no se ha dado una orden concreta para llevar a cabo operaciones, se están evaluando los riesgos y responsabilidades legales, especialmente en el contexto de que cualquier operación podría resultar en daños colaterales, incluidos ciudadanos estadounidenses. Esto representa una preocupación significativa debido a que muchas de estas operaciones podrían desarrollarse en áreas con una alta población de estadounidenses o residentes permanentes, quienes podrían tener el derecho de demandar al gobierno si son afectados.
El análisis realizado por abogados de la CIA es parte de un enfoque cauteloso, buscando prevenir consecuencias negativas para la agencia, especialmente en un ambiente donde la opinión pública y las repercusiones legales son más complejas que en zonas de conflicto más tradicionales, como el Medio Oriente. En resumen, la posible implicación de la CIA en acciones contra cárteles de narcotráfico refleja un cambio en la dinámica de la lucha contra el crimen organizado y abre un debate sobre las implicaciones éticas y legales de tales acciones.