Los padres y madres de los 43 normalistas desaparecidos en Ayotzinapa han expresado su descontento y desconfianza hacia la reciente instrucción del presidente Andrés Manuel López Obrador de realizar una búsqueda en el 27 Batallón de Infantería en Iguala, Guerrero. En un comunicado, calificaron esta acción como una "distracción" destinada a limpiar la imagen del ejército mexicano, que está bajo sospecha por su implicación en la desaparición de sus hijos.
El desencanto proviene de la forma en que se tomó la decisión, ya que los padres señalan que no se les consultó ni se les permitió expresar su oposición durante una reunión reciente. Resaltaron que la búsqueda en el batallón ya había sido intentada anteriormente en 2019 sin éxito, y cuestionaron la efectividad de esta nueva diligencia. Además, indicaron que no hay evidencia concreta de que los estudiantes estuvieran inhumados en ese lugar.
Los familiares recordaron que un testigo protegido afirmó que al menos 25 estudiantes fueron detenidos por soldados y posteriormente entregados a Guerreros Unidos, un grupo delictivo asociado con el caso. Subrayaron que el ejército estaba al tanto de lo que sucedía y ha ocultado información significativa.
Por último, lanzaron críticas al gobierno de López Obrador, acusándolo de repetir errores de administraciones pasadas, especialmente en la manera en que maneja las demandas de justicia de las víctimas y sus familias. Describieron la situación como un intento de dividir a las familias de las víctimas al seleccionar a algunos para participar en la búsqueda y a su vocero, Felipe de la Cruz.