Política
Asesinatos, droga y tortura campean entre los sindicatos de taxistas en Quintana Roo
La detención de Salomón Alfonso Muñoz, líder interino del sindicato de taxistas en Cancún, ha destapado una serie de actividades delictivas que involucran tortura, asesinatos y narcotráfico, presuntamente impulsadas por la directiva del gremio. Este sindicato, que controla más de ocho mil placas de taxis en la región, ha estado vinculado con el gobierno local de Morena, lo que ha intensificado las tensiones en el sector.
Desde la renuncia de Rubén Carrillo Buenfil, quien anteriormente ocupaba el cargo de secretario general y ahora es diputado local por el PT, la situación se ha tornado más conflictiva. Carrillo Buenfil dejó su puesto debido a la presión de los taxistas agremiados, quienes lo acusaron de favorecer a plataformas de transporte como Uber en lugar de defender los intereses del sindicato.
El conflicto entre taxistas y conductores de plataformas digitales ha escalado a actos violentos, incluyendo homicidios, con choferes de Uber como principales víctimas. Además, el secuestro de José Luis Corral Morales, exjefe de campaña de Carrillo Buenfil, ha evidenciado aún más la gravedad de la situación en el gremio de taxistas, que enfrenta un ambiente de violencia y criminalidad en lugares turísticos como Cancún, Tulum y Playa del Carmen.