El asesinato de Arturo Fabián Galván Birrueta, exdirector del Registro Civil de Manzanillo, y su esposa, Rosa María Magdalena Frías Medina, ha generado una fuerte conmoción en Colima. El trágico incidente ocurrió frente a su hijo de siete años, quien milagrosamente resultó ileso. La pareja fue atacada el domingo por la noche mientras circulaban en su automóvil en la avenida Nautilus, lo que ha provocado una ola de indignación y demandas de justicia por parte de la comunidad.
Arturo Fabián Galván, quien contaba con una licenciatura en Filosofía y un doctorado en Ciencias Sociales, había ocupado cargos significativos en la administración pública de Manzanillo, incluido el de secretario general interino del Ayuntamiento. Tras finalizar su gestión, había comenzado una nueva etapa en su vida al instalar un taller de herrería. Su contribución a la comunidad y su carácter comprometido fueron resaltados por la exalcaldesa Griselda Martínez, quien lo describió como un individuo con principios sólidos y un luchador social.
El silencio de las autoridades hasta días después del crimen ha suscitado críticas y demandas para esclarecer los hechos y garantizar la justicia. La comunidad se encuentra en un estado de duelo e inquietud, pues el ataque refleja el clima de violencia que afecta a la región.